Si tienes un negocio es muy tentador buscar mails en internet y enviar mensajes masivos ofreciendo tus servicios o Productos. Es gratis, fácil y rápido… pero está prohibido por ley y ponen multas importantes. Y aparte, si usas un correo con tu dominio web te lo puedes cargar.
Me he encontrado un par de veces en la situación de tener que parar a un cliente que estaba a punto de enviar un mail sobre su empresa a miles de contactos encontrados por ahí, en internet.
En teoría es una gran idea. Si, por ejemplo, vendo Productos para restaurantes, voy a Google, busco restaurantes en mi zona, provincia… Voy apuntando los mails y luego les envío a todos un mensaje del estilo “hola, soy la empresa X y te ofrezco estas cosas a muy buen precio, llámanos, etc”.
Es fácil, es gratis… Todos recibimos cientos de mails de este tipo ofreciéndonos de todo. Y lo primero que pensamos es… “quién me molesta con esto”. El 90% de las veces ni los abrimos…
Esta práctica, mandar mails a gente que no conoces y con la que no tienes ninguna relación, es lo que llamamos SPAM. Y no, no es una gran idea; de hecho, es una idea MALÍSIMA. NO LO HAGAS NUNCA porque:
1.- Está prohibido, te arriesgas a una multa importante.
2.- Te cargas tu correo, y si lo haces desde un correo que acaba en @tudominio.com te puedes cargar el dominio, el correo y el posicionamiento de tu web.
3.- Hay que saber de marketing-ventas para que esos mails sirvan para algo. Si no sabes de eso estás perdiendo el tiempo: no te va a llamar nadie.
1.- Está prohibido por ley
Mandar un mail es muy fácil y gratis, así que cuando empezó a generalizarse su uso, el Estado se puso a trabajar para regular este tema. Como resultado, sólo se pueden enviar mails a las personas (físicas o jurídicas) que den su permiso para ello.
Si todas las empresas enviáramos mails a todo el mundo, se colapsaría el sistema. Recibiríamos millones de mails cada día y sería imposible gestionar nuestro correo.
Pensarás: “¿Sí? Pues yo recibo todos los días un montón de mails de este tipo”.
Y es cierto. Pero si te paras a pensar, todos estos mails provienen de empresas con las que has tenido o tienes alguna relación (operadoras de móvil e internet, franquicias, tiendas…). De algunas eres cliente y en este caso sí puedes enviarte mails promocionales.
De otras igual ya no lo eres, pero lo has sido, y siguen enviándote cosas mientras tú no digas nada, porque para que dejen de enviarte cosas debes ponerte en contacto con ellos y decirles expresamente que no lo hagan.
Que sepas que, además, hay empresas que ceden tus datos a terceros, o a otras empresas dentro de su mismo grupo… Está en la famosa ‘letra pequeña’ de los contratos que firmamos y nunca leemos...
Las tarjetas de cliente que te dan en las tiendas… En lo que firmas estás dando permiso para que puedan enviarte mails con ofertas, etc.
Como ves, de una forma u otra, los mails que te llegan tienen tu permiso para ser enviados.
Y luego sí, habrá algunos mails que te llegan sin que tú tengas ninguna relación con ellos. Esto es lo que no se debe hacer, pero… algunos lo hacen.
La norma que regula todo esto es la Ley 34/2002 de 11 de julio de Servicios de la Sociedad de la Información y del Comercio Electrónico, más conocida como LSSI.
En esta web puedes informarte a fondo. Si incumples esta ley te pueden meter un buen hachazo de multa.
Resumiendo mucho, la LSSI dice que no puedes mandar mails promocionales a quien no te haya dado su consentimiento expreso para ello. Si quieres enviar mails comerciales, tienes que preguntar a la persona-empresa en cuestión si te da permiso para ello y recibir ese permiso expresamente.
Sí puedes enviar mails promocionales a personas-empresas con las que has mantenido o mantienes una relación empresa-cliente.
Como ves, disponer de una lista de mails para ofrecer tus Productos o servicios es más complicado y trabajoso de lo que parece…
Puedes crear esa lista y utilizarla, ya ves que lo hacen cada día miles de empresas, se llama MAILING y es una herramienta más de venta-marketing. Bien utilizada es muy potente, pero requiere de conocimientos avanzados en estas áreas.
Si no sabes nada sobre mailing mejor no lo intentes porque, como veremos en el punto 3, no te va a servir para nada.
2.- Si bombardeas con tus mails desde un correo que acaba en @tudominio.com, te puedes cargar el dominio, el correo y el posicionamiento de tu web.
Esto de mandar mails a mansalva a millones de personas es lo que se llama SPAM. Son correos no deseados, prohibidos, engorrosos… Los gestores de correo, por ejemplo Gmail, tienen su propia carpeta SPAM y están preparados para diferenciar automáticamente el correo deseado del no deseado.
Por ejemplo, si te llegan varios mails de una dirección a la que tú no has mandado nada nunca, es posible que tu gestor de correo le ponga la etiqueta de SPAM. Esos mensajes no irán a tu bandeja de entrada, sino a la carpeta SPAM.
En la foto puedes ver la carpeta de SPAM en mi correo de Gmail:
Y aquí mi repleta carpeta de SPAM... Gmail se encarga de que estos mails indeseados no lleguen a la bandeja de entrada:
Si coges tu correo acabado en @tudominio.com y haces SPAM, los diferentes gestores de correo te etiquetarán como SPAM y llegará el día en que quieras enviar un correo ‘normal’ a alguien y no le llegue. Y esa persona tendrá que mirar en la carpeta SPAM para verlo…
Resumiendo: te cargas tu correo. Y si es con tu dominio, por todas partes quedará registrado que tu correo y tu dominio son peligrosos. Llegarás a tener tantos problemas que tendrás que cambiar de dominio y de correo.
Y si cambias de dominio, TE PUEDES CARGAR EL POSICIONAMIENTO DE TU WEB. El dominio es fundamental para el posicionamiento, como te hemos explicado varias veces, por ejemplo aquí.
Si lo que se te está ocurriendo es usar un correo que no esté ligado a tu dominio (de Gmail, Hotmail…), ‘sólo’ te cargarías tu correo… Pero tampoco es recomendable, por el punto 3.
3.- El MAILING es una herramienta de ventas-marketing que debe ser utilizada sólo por expertos.
Enviar ofertas comerciales por mail, con el consentimiento de sus dueños, se llama hacer MAILING y lo usan cada día miles de empresas con grandes resultados. Aquí sí que nos vale lo de que ‘es gratis’, pero cuidado, ni es rápido ni es fácil.
Como hemos visto, hacer la lista de correo con el permiso de todos es muy trabajoso y una labor a largo plazo.
Después, hay que tener una estrategia y un calendario de envíos bien planificado.
Y lo más importante: hay que saber escribir el mail. Si lo escribes mal, no sólo no conseguirás nada. Es que te puede perjudicar.
¿Qué pensarías de una empresa que te manda un mail con faltas de ortografía súper graves? ¿O que te habla de forma irrespetuosa o maleducada?
El mailing es como hacer una página web: parece que lo puede hacer cualquiera, pero NO. Si quieres hacerlo contrata a una empresa de marketing o a un profesional que lo domine, y no te la juegues.