Hoy se ha sabido que la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos y el FBI tienen acceso directo desde 2007 a los servidores de los más importantes proveedores de servicios de internet, entre ellos Google, Microsoft (Hotmail), Apple, Facebook, Youtube y Skype. Cuando utilicemos estos servicios para chatear, enviar mails o compartir Archivos, hemos de ser conscientes de que estas empresas son estadounidenses y que estamos bajo sus leyes, no las nuestras.
Los periódicos The Guardian y The Washington Post publican hoy extractos de un documento que prueba que la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos lleva seis años espiándonos cada vez que utilizamos los servicios de Google, Facebook o Youtube, entre otros. En el documento se asegura que se cuenta con el consentimiento y aprobación de estas empresas, aunque estas lo niegan.
El llamado programa PRISM es un paso más de Estados Unidos en su lucha contra la amenaza terrorista, desde su punto de vista, y una flagrante violación del derecho a la protección de datos y la privacidad de millones de personas, desde el punto de vista del Usuario. La psicosis desatada en el país a raíz de los atentados del 11-S ha facilitado actitudes de este tipo ‘por el bien común’ y los estadounidenses parecen aceptarlo.
Gran parte de la comunicación mundial fluye a través de Estados Unidos: los principales proveedores de servicios tienen su sede allí.
Polémicas aparte, este asunto ha de hacernos pensar sobre nuestra posición como Usuarios de empresas proveedoras de internet. Hemos de ser muy conscientes de que, cuando usamos Facebook, Google o Skype, estamos relacionándonos con una empresa estadounidense y, por tanto, nos afectan sus leyes y no las nuestras. Es nuestra responsabilidad conocer las condiciones de uso de estos servicios (
aquí puedes ver las 'normas de conducta' de Facebook, por ejemplo) para no llevarnos sorpresas desagradables.